miércoles, 20 de noviembre de 2013

Repertorio I: paciencia.

El repertorio no ha de ser trabajado como cuando éramos jóvenos y jóvenas y había que preparar un examen. El proceso se debería asemejar más a cultivar un bonsai. Paciencia, dedicación, ni demasiadas atenciones ni indolencia. Equilibrio. La ventaja de ser un pianista fracasado es que nadie espera nada de ti con urgencia (ni sin urgencia, si a eso vamos). El tiempo para leer, preparar, asimilar y pulir una obra puede medirse en decadas. En mi vertiente de pianista meramente semifracasado, la de acompañante, he conseguido que el tiempo, en lugar de en semanas como es lo habitual (INCLUSO EN DÍAS) se cuente en meses. No es óptimo, pero es lo que hay.

martes, 6 de noviembre de 2012

Faena pendiente

Toda.

Ideas para posts, conforme los vaya escribiendo (jajejijojujajejijoju):

-Repertorio, no te limites, no te pases.

-Viciar obras, el monstruo que destruye años de trabajo.

-La velocidad correcta.

-Qué es un pianista fracasado.

-Grabarse, desmitificación o masaje al ego.

-Si no es barroco, es barraca.

-Problemas insólitos con el copyright, una historia verídica.